el tiempo y la prisa me lo habían quitado
el andar despreocupado
de canciones en la boca
con los sueños y las rosas
que alguna vez de sangre fueron
No recordaba su sabor
y esta siesta me lo trajo
como catarata liberada
cuando rompe la creciente
anticipo de ausencias... futuras y presentes
No recordaba su sabor
y el color de la primavera
de jacarandá en acuarelas
de trinar insurgente
invadió de recuerdos mis papilas
No recordaba su sabor
y esta tarde que anticipa la despedida
dejó en mi boca el salobre gusto
de esta lágrima… mi vida.